La Virgen del Cristo Portal toma este nombre de un Cristo o crucifijo que se situaba en un pequeño
portal o capilla callejera ubicada en la calle del mismo nombre. Dicho Portal sobresalía de la alineación de las
casas y correspondía a la decimotercera estación penitenciaria.
En
el portal se veneraba un busto de Virgen realizado en piedra y en la
parte superior había un Cristo de Limpias. Sobre la década de 1.460, Dª Aurelia Bravo de Mansilla adquiere la casa a la que estaba
adosado el portal y construye un edificio de nueva planta. Con la
construcción desaparece el antiguo portal, y adosado a la fachada de
la casa se coloca este pequeño altar con la imagen realizada en
azulejos de la Virgen del Cristo Portal.
En
la década de 1.990, se derriba la casa en la que estaba adosado el
altar y se construye una nueva, volviéndose a
colocar la virgen realizada en azulejos.
